HAY ESCALERAS QUE SOLO SIRVEN PARA DESCENDER .

LOS DESCENDIENTES PELDAÑOS DEL PECADO. (SEMANA 21, Pagina 150)

BUENOS DIAS CON BUENOS AMIGOS.

“CHARLES SWINDOLL”

2 Libro de Samuel 13: 1-30   18:24-33

Al leer completo el pasaje del Segundo Libro de Samuel capitulo 13 en el cual de nueva cuenta las palabras del profeta se hacen realidad en la vida de David, “LA ESPADA NO SE APARTARA DE TU VIDA” nos podemos dar cuenta de lo difícil y peligroso que resulta seguir el camino del Pecado y desobediencia, por supuesto que los cometidos por David son de lo mas escandaloso, estoy seguro que si cuando observaba a Betsabe en el Balcón de Palacio y la deseo, hubiera sabido todo lo que estaba por suceder,  se habría metido apresuradamente y se habría olvidado del asunto.

Que tipo de pecados estaban aconteciendo en la vida de David;

RELACIONES INCESTUOSAS ENTRE HERMANOS:

VERSO 1;  Aconteció después de esto, que teniendo Absalón hijo de David una hermana hermosa que se llamaba Tamar, se enamoró de ella Ammón hijo de David. 

   MENTIRAS Y ENGAÑO;

VERSO 5; Y Jonadab le dijo: Acuéstate en tu cama, y finge que estás enfermo; y cuando tu padre viniere a visitarte, dile: Te ruego que venga mi hermana Tamar, para que me dé de comer, y prepare delante de mí alguna vianda, para que al verla yo la coma de su mano. 

·  VIOLACION;

VERSO 14; Mas él no la quiso oír, sino que pudiendo más que ella, la forzó, y se acostó con ella. 

·  SOBERBIA;

VERSO 17;  sino que llamando a su criado que le servía, le dijo: Echadme a ésta fuera de aquí, y cierra tras ella la puerta. 

·  ODIO Y RESENTIMIENTO;

VERSO 22; Mas Absalón no habló con Ammón ni malo ni bueno; aunque Absalón aborrecía a Amnón, porque había forzado a Tamar su hermana. 

Podríamos seguir colocando peldaños a la escalera de Pecado que David tenia en casa, lo triste es que todavía en nuestros días también hay escaleras de este tipo en nuestros hogares y no somos capaces de destruirlas, mediante arrepentimiento y obediencia, no creo que haya familias perfectas pero si hay familias decididas a no cometer los errores tan escandalosos que cometió nuestro buen hermano David, podemos pedir a Dios que revele diariamente que es lo que quiere que cambie y trasforme en nuestro propio bienestar. Amen.