SUMISION TOTAL .
JOB 42:4-5 (RV60)
42:4 Oye, te ruego, y
hablaré; Te preguntaré, y tú me enseñarás. 42:5 De oídas te había
oído; Mas ahora mis ojos te ven.
JOB 42:4-5
(TLA)
4 Tú
dijiste: “Ahora
yo voy a hablar, y tú me vas a escuchar”. 5 Lo
que antes sabía de ti era lo que me habían contado,
pero ahora mis ojos te han visto, y he
llegado a conocerte.
PIENSA en un momento la escena en la cual Job esta hablando con Dios, Job
u personaje abrumado por las
calamidades, ha llegado al grado de una sumisión total, ha entendido
completamente la vana necesidad de contender con Dios, ha discernido
completamente que nuestra naturaleza es pecadora y que nadie es perfecto, ha
disentido de la platicas fatuas de sus amigos quienes le han acusado de pecados
no cometidos, ha llegado el momento de simplemente Humillarse a Dios en una total
sumisión, un arrepentimiento completo y un abandono a Dios quien tiene mayor
sabiduría y conocimiento del caso.
Job con un actitud totalmente resignada y de aceptación simplemente dice; “tu me enseñaras” esas simples palabras dejaron una gran
enseñanza en la vida de muchas personas en la misa sobre todo, cuantas
ocasiones uno trata de dicernir lo bueno y lo malo y trata de entender
completamente un plan que por demás es incomprensible a la mente humana, Dios
tiene capacidades que no imaginamos, pero hay algo que Dios deja como una
posibilidad abierta en la vida de cada ser humano;
La
humillación y el arrepentimiento, dos
palabras en las cuales hemos meditado en anteriores ocasiones, pero hoy la palabra viene a ser
una total sumisión a Dios una entrega total de nuestras vidas en mente y alma,
un sometimiento consiente y claro, en términos legales la sumisión sería; Acto por el cual uno se
somete a otra jurisdicción, renunciando o perdiendo su domicilio y fuero.
SUMISION es una palabra griega “Jupotege” (5292) que traduce como
obediencia, y tiene varias acepciones según sea utilizada ya sea como verbo o
como adjetivo, pero en ambos casos la connotación es similar, (sujeto con dos cadenas), (sujeto a servidumbre),
esto nos indica la forma en que nuestra vida debe ser entregada a Dios, en
completa obediencia, sin dejar nada pendiente, si ello lo logramos hacer, encontraremos
una nueva forma de valorara y ver nuestra relación con el Señor, seguramente de
ello obtendremos una ventaja divina, su gozo y su paz, debemos proseguir a
obtenerlo y no quedar en el camino intentándolo. Amen.
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