DIOS SIEMPRE OBTENDRA LA VICTORIA .
Hechos 9:5-9 (RV60)
9:5 El dijo: ¿Quién eres, Señor? Y le dijo: Yo soy Jesús, a quien tú persigues; dura cosa te
es dar coces contra el aguijón. 9:6 El, temblando y temeroso, dijo:
Señor, ¿qué quieres que yo haga? Y el Señor le dijo: Levántate y entra en la
ciudad, y se te dirá lo que debes hacer. 9:7 Y los hombres que iban con Saulo se
pararon atónitos, oyendo a la verdad la voz, mas sin ver a nadie. 9:8 Entonces Saulo se levantó de tierra, y
abriendo los ojos, no veía a nadie; así que, llevándole por la mano, le
metieron en Damasco, 9:9 donde estuvo tres días sin ver, y no comió ni
bebió.
Hechos 9:5-9 (TLA)
5 —¿Quién eres, Señor? —preguntó
Saulo.—Yo soy Jesús
—respondió la voz—. Es a mí a quien estás persiguiendo. 6 Pero
levántate y entra en la ciudad, que allí sabrás lo que tienes que hacer. 7 Los
hombres que iban con Saulo se quedaron muy asustados, pues oyeron la voz, pero
no vieron a nadie. 8 Por fin, Saulo se puso de pie pero, aunque tenía los ojos abiertos,
no podía ver nada. Entonces lo tomaron de la mano y lo llevaron a la ciudad de
Damasco. 9 Allí Saulo estuvo ciego durante tres
días, y no quiso comer ni beber nada.
Quisiera comenzar con esta frase que
leí esta mañana en el Libro Buenos días Buenos Amigos del conocido escritor y
Pastor Cristiano Charles S. Swindooll;
“… Dios Hará lo que sea necesario para llevarnos aun punto de TOTAL
DEPENDENCIA DE EL…”
“…El Señor nos aguijoneara de manera
inflexible, paciente y todo el tiempo hasta que final y voluntariamente nos
sometamos a el…”
Verso (8) Es probable que cada uno de nosotros tengamos
una percepción personal (POSITIVA) DE
NUESTRA FORMA DE ACTUAR, sabiendo que somos seguidores de Cristo,
asistimos regularmente a la Iglesia, colaboramos en los diferentes ministerios
de la misma, ofrendamos a la Iglesia, y hasta podamos decir que tenemos algún llamado
a servirle, pero en lo personal y creo que eso FUE LO QUE PABLO PENSO EN ESE
CAMINO A DAMASCO, de nada sirven, si no existe una verdadera entrega y
sometimiento a Dios, la evidencia debemos encontrarla en los frutos que
tenemos, Yo puedo hablar mucho y muy bonito, y decir que amo a mis hermanos,
pero nada de eso sirve al Señor si no voy y me preocupo por el y busco como
ayudarlo, (Oracion principalmente),
la vida de entrega a Dios es una vida Integral que tiene varias facetas no solo
esta una Comunión verdadera,
una entrega genuina, una conciencia clara del pecado, y
la valentía para alejarse de el, sino que nuestra vida camine en base a estos
principios, como puedo decir que amo a mi congregación y a mis hermanos si no
doy evidencia de ello, poniéndola primero y buscando siempre su bien.
Pero resulta que si nuestros ojos
son claros podremos observar que en ocasiones no es así, nos cuesta trabajo
salir de nuestra zona de confort, para cambiar, nos es mas fácil recibir que
dar, en todos los aspectos, ya sea material o espiritual, si nuestra vida no
cambia entregándonos a Dios genuinamente no podremos estar tranquilos y seguiremos
dando coses al aguijón, como le sucedió a Pablo. Amen.
No hay comentarios:
Publicar un comentario