DIA 33 OPERACION JESUS.
SIRVE EN EL CUERPO DE JESUS.
Mateo 9:9
9:9 Pasando Jesús de allí, vio a un hombre llamado Mateo, que estaba sentado al banco de los tributos públicos, y le dijo: Sígueme. Y se levantó y le siguió.
La vida de un seguidor de Jesús se resume en un dos verbos; LLAMAR Y SEGUIR.
El verso que utiliza el devocional del día de hoy es verdaderamente todo un desafío en la vida de todo Cristiano que se diga eso; “discípulo de Jesús” la palabra que en griego se utiliza para seguirme es “AKOLOUDSEO” que significa seguir en el camino, acompañar en el camino, el verso toma otro sentido si aplicamos esta expresión al saber que seguir a Jesús significaba acompañarlo en todo lo que iba a realizar, en realidad, el primer nombre de Mateo era Leví, y Mateo fue el nombre que recibió después de su llamamiento, y significa “Don de Dios”. Además, podemos observar en todas las listas de los nombres de los apóstoles jamás aparece el nombre Leví, sino siempre Mateo. Esto nos indica que el profundo cambio operado en su vida, una transformación que incluyó la substitución de su propio nombre. Algo parecido ocurrió con Simón cuando recibió el nombre de Pedro, y de Saulo cuando comenzó a ser conocido con el nombre de Pablo.
Hay varias enseñanzas que hay en el verso que meditamos, uno de los aspectos que mas llaman la atencion es la rapidez de la respuesta de Mateo. Algunos piensan que respondió tan pronto porque ya hacía un tiempo había sabido acerca de Jesús, de sus milagros y sus enseñanzas y que en su interior ya se había decidido a renunciar a todo si Jesús lo llamaba. En cambio, otros piensan que fue una obra sobrenatural del Espíritu Santo en Mateo, que provocó en él una respuesta inmediata a la orden de Jesús cuando le dijo: “Sígueme”.
Mateo con su banquete nos da otra buena enseñanza; que la decisión de seguir a Jesús merece una fiesta. Así como es difícil pensar en un casamiento sin una celebración, porque siempre ha sido considerada la boda como un gran acontecimiento en la vida de un hombre y una mujer, así también debería tener la misma importancia o una importancia mucho mayor, festejar el día de la conversión, o el día del bautismo, o del llamamiento al ministerio pastoral. Para Mateo su decisión de responder al llamado de Jesús, merecía un banquete “con todo”, a lo grande.
Jesús dijo que había venido para “llamar” a los pecadores al arrepentimiento, es decir hacia un cambio de manera de pensar, y en consecuencia a un cambio de vida. Esa fue su declaración de misión. Jesús nos enseñó con esto que no debemos conformarnos con vivir una hermosa amistad y compañerismo con la gente de la iglesia, es decir, con los que aman a Dios y tratan de vivir de acuerdo a las enseñanzas de la Biblia, sino que también debemos acercarnos a los pecadores para llamarlos a un cambio de mentalidad, Y ESO MIS HERMANOS SOLO SE LOGRA SIRVIENDO EN EL CUERPO DE JESUS, Amen.
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